Planteo esta interrogante ya gastada pero aun vigente para el interés de los hombres y mujeres reflexivos (o los que tienen tiempo para practicar las oscuras artes de razonar). Es acaso una sociedad de la imagen?, una manera de comprobarlo es echando una mirada a nuestras gente joven, el eslogan ¿Quién eres? Se vuelve muy popular por estas edades, el deseo de saber quien soy mas allá de nuestro núcleo familiar toma fuerza, pero, ¿como se desenvuelve sanamente en una sociedad que juzga la humanidad de las personas con base a las profesiones que practican?… en ese campo somos muy buenos, si es gerente de una exitosa empresa o abogado con muchos casos ganados, automáticamente ya eres un gran hombre, pero ¿porque? Es fácil llegar a una respuesta. Siempre juzgamos lo que se ve, el ciudadano ideal para la sociedad consumista es el capaz de consumir grandes cantidades de “servicios” o lujos.
La sociedad de consumo es instantánea, lo que importa es consumir y después de hacerlo volver a consumir, por eso la muerte o ideales no son buenos productos de consumo, porque estos elementos no posen la naturaleza instantánea de los productos.
La imagen es el nuevo opio del pueblo, es curioso que ahora no exista las utopías de antaño, que no se hable de cambiar la sociedad, ahora la moda es decir que “hay que cambiar el mundo”, es por el mismo consumismo, no es que no exista mas utopías o que no se pueda cambiar la sociedad, es que la gente prefiere las cosas que brinden placer de forma instantánea, el placer es ya un objeto de consumo, hasta el sexo es visto en forma consumista!! Es más fácil tener sexo con otras personas que crear un lazo amoroso y psicológico con una... Esa es la maldición que tiene la sociedad, el deseo de no crear algo prolongado y duradero, “¿para que?” dirá el consumista alineado “todo en el mundo se usa (hasta las personas) y si estoy aburrido con algo(o alguien) lo boto y consigo otro nuevo”
es impresionante
ResponderEliminaryo hago sufrir a las personas.